Descripción: |
La representación oficiosa dada al cardenal Gomá en diciembre de 1936, el envío Ildebrando Antoniutti como delegado apostólico en julio en misión humanitaria, mantuvieron bajo mínimos las relaciones de la Santa Sede con el Gobierno de Franco. La situación no cambió en 1937. El nuncio Gaetano Cicognani no llegó hasta junio de 1938. Los pasos discretos de una diplomacia secreta aconsejaron en septiembre de 1937 formalizar las relaciones, en su nivel más bajo. Antoniutti y Pablo de Churruca fueron nombrados encargados de negocios, en Burgos y ante la Santa Sede. La carta colectiva de los obispos ayudó a mejorar la imagen los nacionales ante los católicos de otros países. La posición doctrinal en que se insertan estos hechos quedó fijada en las tres encíclicas publicadas en marzo de 1937. En ella se denuncia la persecución religiosa del comunismo, el temor al nazismo y el deseo de salir de la persecución personando y luchando por la justicia a favor de las clases populares. Informal representation given to Cardinal Gomá in December 1936, sending Ildebrando Antoniutti as apostolic delegate in humanitarian mission in July, remained at its lowest level relations between the Holy See with the government of Franco. The situation changed in 1937. The nuncio Gaetano Cicognani did not arrive until June 1938. Discrete steps of a secret diplomacy advised in September 1937 to formalize the relationship, at its lowest. Antoniutti and Pablo de Churruca were named Responsible of Affairs, in Burgos, and to the Holy See, in a respective way. The collective letter of the bishops helped to improve the image of «national» Spain before the Catholics in other countries. The doctrinal position in which these facts were inserted was fixed at three encyclicals published in March 1937. They condemned the religious persecution of communism, nazism and the fear of a desire to runaway of the persecution forgiving people and fighting for justice for the working classes |