Descripción: |
En este trabajo se analizó el período histórico de 1980-2002
en cinco pequeñas economías abiertas: Australia, Canadá,
Nueva Zelanda, Suecia y Noruega. El propósito central es analizar
el efecto del proceso de desinflación que inició en forma
simultánea a principios de la década de los noventa en estos
países sobre el vínculo entre el tipo de cambio real y el
diferencial de intereses. En un ambiente de inflación estable, se
espera que un incremento en el tipo de cambio real (depreciación)
provoque una reducción en el diferencial de interés que induzca
efectos estabilizadores sobre la producción real. En consecuencia
para que una economía obtenga los beneficios de un régimen
cambiario más flexible, se requiere que la economía arribe
a un nuevo estadio de estabilidad de precios. En este trabajo se encontró
evidencia empírica de que el efecto de incrementos en el tipo de cambio
real sobre el diferencial de interés se vuelve más negativo
cuando la inflación es baja en comparación con lo que sucede
cuando persisten altos niveles de inflación. Lo anterior tiene importantes
implicaciones para el funcionamiento de sistemas cambiarios más flexibles,
ya que permitiría los ajustes necesarios en las economías ante
distintos tipos de perturbaciones. En otras palabras choques externos
podrían ser absorbidos mediante depreciaciones del tipo de cambio
real y disminuciones en el diferencial de interés. En este trabajo
se realizaron las estimaciones econométricas con base a la
metodología de datos panel. Se aplicaron técnicas de
estimación de efectos fijos y efectos aleatorios corrigiendo por
autocorrelación y endogeneidad. Asimismo se realizaron a las series
las pruebas de raíz unitaria, y a las ecuaciones estimadas, las pruebas
de cointegración.
Palabras claves:
Desinflación, tipo de cambio real, diferenciales de intereses.
|