Descripción: |
En el amplio cuadro morfoestructural del Norte Argentino, la región estudiada se halla
comprendida en el ambiente de prepuna y geográficamente forma parte de las Cumbres
Calchaquíes.
En épocas precámbricas esta región estaba constituida casi exclusivamente por material
pelítico y en reducida proporción por elementos psamníticos. La posterior diagénesis y
metamorfismo térmico y dinamotérmico modificaron aquel aspecto primitivo de las rocas. Los
sucesivos ciclos diastróficos precámbricos produjeron intensas modificaciones, no solo
imprimiéndoles efectos locales a los sedimentos, plegándolos y fracturándolos y hasta
produciendo amasamiento de los mismos; sino que también esbozaron las líneas directrices
que rigieron la tectónica posterior.
Una prueba de este carácter positivo durante el Precámbrico y Paleozoico, es la distribución
que presentan los sedimento marinos del Paleozoico inferior, que se extienden desde los
24°45’ de latitud sur y 66° de longitud oeste hasta los 25°15’ de latitud sur y 65° de longitud
oeste línea que, con dirección NNW a ESE pasa al naciente de la localidad de Cerrillos. Según
el estado actual del conocimiento, su distribución no ha sido hasta ahora reconocida hacia el
poniente de esta línea, la que indicaría provisoriamente el alcance occidental de los mares
paleozoicos.
Al producirse la dislocación en bloques del macizo de la Puna, de su borde oriental se fueron
separando troncos montañosos alargados en sentido meridional, los que por compresión
posterior se elevaron formando las grandes dorsales, mientras que los restantes al hundirse
constituyeron el fondo de los amplios valles intermontáneos, dentro de los cuales fue a alojarse
el mayor espesor de la sedimentación posterior.
En la zona estudiada los depósitos más antiguos que se encuentran formando el relleno de
estos valles son los sedimentos de origen continental que hemos reconocido bajo la
denominación de Estratos de Pirgua, representados por conglomerados brechosos, areniscas
conglomerádicas, areniscas finas y arcillosas, de coloraciones preferentemente rojas y cuya
edad hemos referido al Triásico.
Los Estratos de Pirgua por lo general están coronados por el Horizonte Calcáreo Dolomítico,
formación que no aparece en la zona relevada, pero que ha sido reconocida en el sinclinal de
Amblayo y en Los Bayos (quebrada de Las Concha) dentro de la misma cuenca sedimentaria.
Para el Horizonte Calcáreo Dolomítico aceptaremos la edad Triásico superior – Liásico inferior,
asignada por Bonarelli.
Rellenada la cuenca, se produce un hiatus sedimentario, que abarca casi todo el Jurásico y
parte de Cretácico y la acción tectónica (plegamiento y reactivación de las principales fallas)
elevan parcialmente la cuenca, sedimentándose en las partes negativas las arenisca gruesas,
finas, tufíticas y arcillosas que constituyen los Estratos de Santa Bárbara, formación para la que
hemos aceptado provisoriamente una edad Cretácico superior.
Si aceptamos esta edad como correcta, basándonos en las conclusiones a que se arribara en
el estudio de los restos fósiles hallados en La Yesera, debemos aceptar también la existencia
de un hiatus entre la formación Santa Bárbara y los sedimentos terciarios depositados sobre
ella, los que hemos reconocido con el nombre de Estratos de Angastaco; esta ultima formación
tiene gran desarrollo en el valle Calchaquí y su edad determinada por su contenido fosilífero es
evidentemente Mioceno superior.
La tectónica terciaria, de acción intensa afectó la serie sedimentaria y las rocas del basamento,
enmascarando los resultados de otros diastrofismos previos de menor intensidad, que son los
que han dado el delineamiento general del relieve posterciario.
Como expresión saliente de las condiciones de relieve creado por la conjunción de los factores
tectónicos y gliptogenéticos en los albores del Cuaternario, se encuentran entre la confluencia
de los ríos Santa María y Calchaquí y la iniciación misma de la quebrada de Las Conchas
sedimentos lacustres que manifiestan la existencia durante el Pleistoceno de un gran lago que
habría ocupado un área extensa. La edad de sus característicos sedimentos pelíticos está dada
por su contenido faunístico.
El desarrollo posterior de esta región, por la captura de las aguas del lago y por lo tanto de los
ríos Santa María y Calchaquí por el río de Las Conchas, y las posibles razones por las que este
último ha cortado su cauce atravesando las filitas del Mollar ha sido tratado con extensión por
Frenguelli (7, pag. 249 y sig.). |